Esta aquí dentro, no puede ser peor
De ninguna forma se podía adivinar...
Cuando no sabía nada, vivía feliz
Ahora que lo conozco
Ocupa mi cabeza, además de mi cuerpo.
Esta mañana , me despierto reposado
Cuando la despreocupación
Deja enseguida la angustia en su sitio
Para vestirme de su manta de plomo.
La respiración penosa, intento olvidarla
Pero que complicado ignorar, ese nuevo inquilino,
Que se ha alojado en mi propio cuerpo,
Con la pretensión de ser el nuevo dueño.
Me lo imagino
Rediseñando todo
Derribando los tabiques, acomodando sus objetos
Destruyendo sin vergüenza, años y años de obra.
De momento las reformas se realizan dentro
Pero si el chaval se aloja
El cambio de fachada...
Ya esta planeado.
No tengo más remedio que sacarlo de ahí,
Brindo por mi salud y su trágico fin
Bebo de un trago mi poción mágica
Pensando al gusano que come la fruta.